Señor director:
Con lo referente al sueldo millonario de Marcela Cubillos por la Universidad San Sebastián, es escandaloso y grotesco que una casa de estudios privada sea la caja pagadora de una figura política, pero si empecemos con las instituciones del Estado como embajadas y asesores de ministerios, los cargos gerenciales de ENAP, rostros de TVN o de directivos de Codelco. TVN fue salvada por el Estado de una inminente quiebra, ENAP tiene una deuda de 10 veces su patrimonio que solo lleva perdidas y Codelco con pobres resultados en los últimos años. El punto es que, si queremos “medir con la misma vara” con Marcela Cubillos, empecemos con las empresas del Estado o las mismas embajadas que son el premio de consuelo para los perdedores de elecciones o cuotas políticas de los partidos.