Charla Motivacional : POR JORGE ABASOLO

No está de más enfatizar que muchas personas no llevan a cabo sus proyectos por una razón muy simple: la INSEGURIDAD.

¡Es esa la gran piedrecilla en el zapato que nos impide llevar a cabo nuestro propósito cardinal en la vida!

Olvidamos que vivir implica arriesgarse frecuentemente.

 

 

 

 

 

 

Cuando mi amiga Milena Gallegos, del Centro  Cultural “Antumapu”  me llamó para que dictar una charla en su espacio CONVERSANDO CON…en el aula de apoyo al estudiante, de la Municipalidad de Mulchén, y su incansable alcalde  Jorge Rivas, acepté de inmediato.

Conozco los pergaminos de Milena Gallegos y esa  manera admirable de estar en permanente estado de curiosidad.

 

Mi experiencia fue más que edificante. Hablar durante más de una hora  ante un grupo de jóvenes de cuarto medio (60 personas) en la ciudad de Mulchén fue algo que me caló hondo.

El tema era desafiante (Motivación) y me encanta enfrentar a público joven. En este caso eran todos seleccionados de cuartos medios de los liceos de esa  comuna.

 

 

 

Luego de mi charla, fue un gusto compartir con los jóvenes estudiantes asistentes y algunos profesores

 

Llegué un día antes, de manera que pasamos a tomar onces donde   “Morenna”, un local renovado, con precios módicos y con cocina a la vista

Nos atendieron demasiado bien y por eso lo recomiendo.

 

La charla fue de una hora y 20 minutos.  Creo que lo hice bien, pues tengo experiencia en el tema. Pero el hecho de alternar con 60 jóvenes que me escucharon en silencio y con atención inherente al rigor litúrgico y la paciencia benedictina fue emotivo para mí.

¡Qué enaltecedor que los jóvenes te escuchen con presteza y atención!

¿Y de qué hablé?

Pues, de la motivación, en un país que se declara en un 37 por ciento triste, un 12 por ciento con angustia y el resto con una distimia o depresión a secas.

Mi charla giró en torno a cosas que me han pasado en lo personal y otras que me han narrado gentes que han estado al borde de la muerte.

A continuación les dejo un extracto de lo que fue mi conferencia:

 

 

-Luego de la muerte de mis padres y tres hermanos…yo estuve un año con depresión…haciendo las cosas a la fuerza, a contrapelo…meramente por cumplir.

Es decir, había caído en una abulia total.

En un desgano absoluto…hasta levantarme era una tarea titánica para mí.

 

Seguramente ustedes se acordarán del caso de un avión uruguayo que cayó en la cordillera de los Andes, en un día de octubre de 1972.

 

 

 

Los muchachos debieron permanecer 72 días en la cordillera, sin agua, sin comestibles…y con 20 grados bajo cero.

Los 16 sobrevivientes han coincidido en que una de las razones que los salvó es que se pusieron a trabajar en equipo.

Ellos eran rugbistas, y como ustedes sabrán, el rugby es un deporte en donde la solidaridad y el trabajar con sentido de equipo es fundamental.

Me lo dijo el propio “Coche” Inciarte, algo así como el líder del grupo:

 

Coche Inciarte junto a Abasolo: “Si nosotros no hubiésemos sido tan amigos, no hubiésemos sido jugadores de rugby (juego colectivo) no habríamos podido planificarnos como lo  hicimos”

 

 

 

Claro, también la Fe jugó un papel fundamental en ello…y la voluntad de estos jóvenes de salir adelante –a pesar de la adversidad- también fue de gran importancia.

 

 

Para los orientales la palabra CRISIS no tiene esa connotación tan derrotista que tiene en Chile.

En Chile la palabra CRISIS asusta, espanta…ahuyenta.

 

Los chinos, por ejemplo, representan la palabra CRISIS con dos ideogramas.

Uno significa peligro

El segundo significa oportunidad.

Y me pasé toda una noche pensando en esto…llegando a la conclusión que esta acepción de la palabra crisis era la que yo debía tomar.

Estaba consciente que me encontraba en una etapa de peligro.

Y los chilenos generalmente nos quedamos ahí. Sufriendo en medio de ese estado de peligro.

Acá no se habla de oportunidad.

Y entonces empecé a buscar esa oportunidad”.

 

Un hecho que me llama la atención, es que los grandes empresarios –y hablo a nivel local y mundial- han tenido grandes fracasos.

Dicho de otro modo, los fracasados también triunfan.

En mis andaduras por este caprichoso camino llamado existencia, he podido palpar que gente con atributos casi de sobra, quedaron a la vera del camino; mientras otros, llegaron a buen puerto…o al menos pudieron sentirse en estado de plenitud, aunque sea por breve tiempo.

 

Muchas veces es preferible sufrir las consecuencias de un fracaso que el hecho de lamentarse para siempre de no haber intentado ser aquello que siempre quisimos.

 

Si su empresa o usted  está interesado en una charla motivacional ruego escribir a jorgeeibar13@gmail.com

CELULAR: 977 800 008

TELEFONO FIJO: 45-271 93 20

 

 

 

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